La "esperanza" de que el proceso de diálogo con ETA culmine en la erradicación del terrorismo en el País Vasco "sigue en pie", declaró ayer José Luis Rodríguez Zapatero, pero "el camino hacia esa meta es incompatible con la impaciencia". Con esta breve alusión al proceso abierto para convertir el alto el fuego permanente en definitivo trató ayer el presidente de calmar los ánimos de los miembros de su partido y de la ciudadanía, después de un fin de semana en el que el rebrote de la violencia callejera en Euskadi y la ausencia de noticias sobre un avance en las negociaciones con los terroristas han generado una sensación de retroceso en el proceso de paz.

Zapatero no quiso dar pistas sobre cuándo tendrá algo que contar a los ciudadanos, aunque estos últimos días ha reiterado que el ministro del Interior acudirá a finales de este mes al Congreso de los Diputados a dar cuenta de la marcha de proceso de paz.

INFORME Fuentes de la dirección del PSOE descartaron que Zapatero ofrezca hoy un informe a la ejecutiva del PSOE, a pesar de que se comprometió a ello en la última reunión. La sensación de atasco que destila el proceso de paz fue lo que quiso atajar Zapatero al reiterar que pondrá todo su empeño en que el diálogo fructifique: "Merece la pena y lo lograremos", animó, tras agradecer "la ayuda" de quienes están arrimando el hombro para llevarlo a cabo, en alusión al PNV.

Además de hablar de paz, Zapatero repasó los grandes hitos económicos, sociales y legales que su Gobierno ejecutará en el 2007. A la aprobación de la ley de igualdad y la entrada en vigor de la de dependencia, el líder del PSOE añadió el anuncio de 10.000 viviendas sociales para universitarios y leyes del agua, del suelo, para el desarrollo rural, del libro, del cine y de la música. Dijo que los españoles alcanzaremos en el 2008 la renta per cápita media de la UE y el paro bajará del 8%.