Es consciente de que ha de ganarse a pulso su futuro como rey de España. Se prepara a conciencia para cuando llegue el momento de la sucesión, sin olvidar que el principio dinástico no está arraigado entre los ciudadanos. Felipe de Borbón y Grecia al entrar en la cuarentena --nació en Madrid el 30 de enero de 1968--, tiene claro que el camino que debe recorrer discurre por el estricto cumplimiento de los preceptos constitucionales y por una actuación del todo imparcial si llega a ser coronado como Felipe VI.
Tras varios romances, la boda del Príncipe con la periodista Letizia Ortiz acabó con las cábalas sobre el futuro familiar de Felipe. Ese matrimonio morganático acercó la Corona a las vidas de la mayoría de los ciudadanos. La situó en una zona de proximidad con la clases medias/medias, la franja social más amplia del país. Un dato positivo que arrancó muchos aplausos, aunque algunos sigan empeñados en desprestigiar a la Princesa.
El acoso de la COPE
Pero Letizia y Felipe, muy enamorados y felices, intentan hacer caso omiso de esas críticas. A la cizaña que plantan algunos programas basura, se añade el acoso de las mañanas de la COPE. En la emisora de la Conferencia Episcopal se ha podido escuchar: "El tabú de la monarquía se rompió el día que el príncipe de Asturias se casó con Letizia y nos dijeron que era lo mejor para España casarse con una divorciada".
El Príncipe tiene en todo caso una difícil asignatura pendiente. La reforma de la Constitución en lo que se refiere a sucesión en la Corona, deberá acabar con la actual discriminación que posterga a la mujer. Es el único islote no paritario. Pero, ante el peligro de que el referendo para recuperar la igualdad entre hombre y mujer en la jefatura del Estado se convirtiera en un plebiscito sobre monarquía o república, la iniciativa se ha ido aplazando sine die. .
De momento, la biología ha dado tregua al desasosiego de la Zarzuela. El nacimiento de Sofía, la segunda hija de los Príncipes, ha evitado que un segundo vástago varón --que hubiera sido el sucesor según la norma vigente--, desposeyera a la primogénita Leonor de cualquier derecho sucesorio.
Felipe y Letizia albergan la idea de ampliar la prole hasta los cuatro o cinco hijos. Si la familia se queda en Leonor y Sofía, el inicio del proceso quedaría aplazado a la espera de la mejor ocasión que debería coincidir con la disolución de las Cortes Generales.
Coincidiendo con su mayoría de edad, el 30 de enero de 1986, Felipe juró fidelidad a la Constitución. Desde entonces, desempeña las funciones de heredero a la Corona, y como tal tiene asignado un sueldo a cargo del presupuesto global de la Casa del Rey que aprueban las Cortes.
Aunque se desconoce la cuantía exacta de su salario, que establece su padre, el Príncipe realiza cada primavera su declaración del IRPF.
A lo largo del pasado 2007, el príncipe de Asturias no ha parado de viajar. Además de recorrer varias comunidades autónomas de España, ha asistido a la toma de posesión de los presidentes de Nicaragua, Ecuador y Argentina. Ha visitado la sede de la OCDE en París, la confederación de la OIT en Ginebra. También ha viajado, con su esposa, a Portugal, Marruecos y China.
El mismo colegio
El Príncipe fue educado en los colegios de Santa Elena y de Santa María de los Rosales, donde cursó EGB y BUP. Santa María de los Rosales, centro que no pertenece a ninguna orden religiosa, es el preferido por Felipe y Letizia para educar a Leonor. Estudió también en el Lockfield College School de Toronto (Canadá), se licenció en Derecho y Económicas en la Universidad Autónoma de Madrid, cursó estudios militares y, por último, realizó el máster en Relaciones Internacionales de la Universidad católica de Georgetown de Estados Unidos.
El futuro del príncipe Felipe está claramente planteado en el marco de la continuidad monárquica. Y aunque se han oído voces que reclaman el fin de la monarquía, PP y PSOE apuestan firmemente por mantener el sistema. Ambos partidos prestarán un apoyo sin fisuras al heredero de la Corona cuando tenga que asumir la más alta responsabilidad del Estado.
