El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha ordenado esta madrugada el ingreso en prisión de cuatro de los cinco detenidos el pasado sábado en el País Vasco en la última operación antiterrorista desarrollada por la policía tras el arresto horas antes en Francia del presunto jefe del aparato militar de ETA, Jurdan Martitegi.

Se trata de Igor García Ochoa, Asier Ortiz De Guinea, arrestados los dos en Vitoria, Sergio Bravo Saez Urabain, que lo fue en Bilbao, y Gorka Iriarte, detenido en la localidad guipuzcoana de Rentería, a quienes el magistrado acusa de colaboración y/o integración en ETA.

A Jonathan Guerra Tejero, arrestado también en la capital alavesa, Garzón le ha prorrogado su detención hasta el próximo viernes, cuando decidirá sobre su situación procesal. Los interrogatorios de los detenidos, en los que ha estado presente el fiscal de la Audiencia Nacional Juan Moral, comenzaron pasadas las 18.30 horas de ayer y se han prolongado durante más de seis horas.

Intención de formar un comando

Las primeras investigaciones de la policía apuntan a que estos cinco detenidos, junto con los dos arrestados en Francia y que estaban en compañía de Martitegi en el momento de su detención --Alexander Uriarte y Gorka Azpitarte--, pretendían formar un comando en Álava.

El primer objetivo de esta nueva célula sería atentar en las próximas semanas en coincidencia con la toma de posesión a principios del mes de mayo del socialista Patxi López como nuevo lendakari. Junto a estos cinco jóvenes fue también arrestada en Vitoria Olaritz Aracama Moreno, aunque fue puesta en libertad el 20 de abril.

Investigación preliminar

Por otra parte, la justicia francesa abrió ayer una investigación preliminar por asociación de malhechores con fines terroristas a Martitegi, Uriarte y Azpitarte, que habían sido trasladados la pasada madrugada a la capital francesa desde Montpellier (sur), según han informado fuentes judiciales.

A estos tres presuntos etarras se les investigará por posesión, transporte y fabricación de explosivos, así como por posesión y transporte de armas y municiones.

Además pesan sobre los tres cargos de robo como miembros de una banda organizada de vehículo, armas y matrículas de vehículos, según han señalado las mismas fuentes, que han agregado que también serán investigados por los delitos de posesión de documentación administrativa falsa y uso de matrículas de vehículos falsificadas.

También se les imputa el cargo de ocultación de extorsión como miembros de una banda organizada en relación con una empresa terrorista.