El juzgado de guardia de San Sebastián decidió ayer enviar a prisión a tres de los detenidos el domingo en esta ciudad durante los graves incidentes registrados tras la manifestación ilegal de Batasuna. A la vista del atestado del Departamento de Interior, se les acusa de un delito de manifestación ilegal, atentado contra agentes de la autoridad y desobediencia. Las otras cuatro personas detenidas quedaron en libertad, a condición de presentarse ante el juez todos los lunes.

Askatasuna, asociación de defensa de los presos de ETA, explicó que dos de los detenidos que fueron enviados a la donostiarra cárcel de Martutene son Josetxo Lukas y Unai Saizar, y que el tercero es un vecino de Vitoria. Esta misma fuente aseguró que quedaron en libertad Rubén García, natural en Irún (Guipúzcoa) y otras tres personas que declararon ante el juez en presencia del abogado de oficio.

Esta asociación de la izquierda aberzale denunció también que la detención de Lukas se practicó junto al Hotel Londres, de la capital guipuzcoana, "lejos" de donde se registraron los incidentes. Sin embargo, los altercados y enfrentamientos entre manifestantes y Ertzaintza alcanzaron la avenida de la Libertad, muy cercana al citado hotel.

PERIODO DE INCOMUNICACION Askatasuna denunció que los siete detenidos sufrieron de facto un periodo de incomunicación en dependencias de la Ertzaintza. Ninguno de estos datos fue confirmado por el Departamento de Interior anoche.

Las siete personas, que fueron arrestadas por la Ertzaintza por un presunto delito de desórdenes públicos y otro de participación en una manifestación prohibida, prestaron declaración en el juzgado de guardia de la capital guipuzcoana a lo largo del día de ayer.

En los incidentes del pasado domingo resultaron heridas más de una decena de personas, entre ellas un turista austriaco y otro canadiense. Cinco de ellas fueron evacuadas a distintos centros sanitarios de San Sebastián, donde fueron dados de alta seguidamente, al igual que tres agentes de la Ertzaintza atendidos por contusiones.

COMUNICADO ABERZALE La ilegalizada Batasuna remarcó que "mientras se vulneren los derechos de los ciudadanos vascos, el conflicto seguirá estando en la calle", y añadió que la solución del problema "también debe pelearse" en los espacios públicos.

El partido que lidera Arnaldo Otegi indicó, en un comunicado, en el que no hace referencia alguna a los incidentes que provocaron las detenciones, que la apuesta por un proceso de paz requiere "marginar la represión, las fórmulas estériles de vulneración de derechos y los intereses partidistas".

En un claro mensaje al Departamento de Interior vasco, el grupo ilegalizado apunta que "la irresponsabilidad y la hipocresía no tienen cabida en el actual contexto" y que "las medidas que vulneran los derechos de los ciudadanos no deben tener sitio" si se está a favor de la superación del conflicto.

Batasuna anunció también en su nota su intención de seguir difundiendo el contenido de su propuesta "Orain herria, orain bakea" (Ahora el pueblo, ahora la paz), que sirvió de lema para la manifestación prohibida del pasado domingo.

Por su parte, el Gobierno municipal de San Sebastián, formado por el PSE y Ezker Batua, se congratuló ayer de que los ciudadanos "hayan sabido responder con la vuelta a la normalidad" a quienes "intentan dañar la imagen de la ciudad" con incidentes como los del domingo.