Todo estaba medido en el PP. Al menos, todo lo que concernía a la difusión pública de la entrevista entre Rajoy y Zapatero. El líder del PP tenía tan clara la conclusión que iba a extraer de la cita que, antes de llegar a la Moncloa, ordenó a su servicio de prensa que entregara a los periodistas allí destacados un texto propagandístico que denuncia el "aluvión de contradicciones" dentro del Gobierno y del PSOE en torno al modelo de Estado. Toda una tarjeta de presentación.

El documento censura el "persistente silencio" de Zapatero sobre la reforma territorial y cita los roces que ésta ha suscitado. Sin embargo, Rajoy olvidó informar a la prensa de que Zapatero le había ofrecido un pacto nacional en inmigración.