UNOS 200 agentes de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) protagonizaron ayer una protesta histórica. De uniforme, acudieron a la sede del Defensor del Pueblo en Madrid (foto) para quejarse de que siguen sometidos a un régimen que permite los arrestos y para exigir al Gobierno que modifique el estatuto del cuerpo.