La huelga de hambre de algunos procesados por el 11-M aguzó ayer el ingenio del PP, que la relacionó con el ayuno que ayudó al etarra Iñaki de Juana Chaos a acceder a la prisión atenuada. Pero el PSOE no anduvo a la zaga, y acusó al PP de "alentar" a los presos a seguir a De Juana. Las huelgas de hambre de uno y otros "no tienen la menor conexión", aseveró el portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana, para luego precisar: "Algunos creerán que a este Gobierno se le puede coger la medida". Su homólogo socialista, Diego López Garrido, rebatió: "Quien primero insinuó, no sé si decir que alentó, sucesivas huelgas de hambre de presos fue el PP".