El Gobierno va a tener que arremangarse y buscar acuerdos con las fuerzas de izquierda para que algunas de las medidas "estrella" anunciadas por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el debate del estado de la nación --especialmente en materia de adquisición de vivienda y ayudas al automóvil-- no sean rechazadas o modificadas por el Congreso el martes, en las votaciones de las propuestas de resolución.

De hecho, fuentes del Ejecutivo ya dan por hecho que el PSOE perderá diversas votaciones. Por ello, los socialistas y el Gobierno central han tratado de centrar la atención en la batalla dialéctica del pasado martes y minimizar el impacto de las derrotas que puedan sufrir.

La medida de más impacto, la eliminación de la deducción por vivienda a partir del 2011 a rentas superiores a 24.000 euros, va a contar con el rechazo frontal del Partido Popular y de CiU. Además, el PNV, pese a que la fiscalidad vasca no se ve afectada por esta posible reforma, tampoco ve con buenos ojos el anuncio del jefe del Ejecutivo.

Es más, el presidente de los populares, Mariano Rajoy, planteará en una de sus resoluciones no solo que no se recorte sino que se "mantenga y mejore" la deducción por adquisición por vivienda, concretamente pasando del 15 al 25% del IRPF y aumentando el límite máximo deducible anualmente hasta alcanzar los 10.000 euros, informa Gemma Robles.

FACILITAR EL ALQUILER Según el líder del PP, la medida propuesta por el Gobierno supone un "atentado" para las clases medias y no servirá para dar salida al estoc de viviendas desocupadas porque el problema real es conseguir créditos para acceder a una hipoteca. Con argumentos muy similares, Convergència i Unió también plantea en una de sus resoluciones su discrepancia total con el Gobierno, defiende el mantenimiento de las deducciones y propone facilitar alquileres a precios que oscilen entre los 250 y los 400 euros.

Ante este rechazo, el PSOE deberá contar con las fuerzas de izquierdas. ERC e IU-ICV, en cualquier caso, también creen que debe modificarse la medida, elevando el listón a partir del cual se eliminará la deducción, para no perjudicar a las clases medias. Iniciativa se muestra dispuesta a la supresión de la deducción porque actualmente acaba convirtiéndose en una transferencia del Estado al promotor porque este repercute la deducción en el precio final.

El portavoz parlamentario socialista, José Antonio Alonso, inició ayer contactos con ERC e ICV. Esquerra le planteó al PSOE como condición para cualquier pacto que apoye tres resoluciones en las que incluye los temas de la llamada "carpeta catalana", es decir, financiación autonómica de acuerdo con los términos que fija el Estatut y el traspaso de Cercanías de Renfe. Además, ERC plantea también como condicionante para su apoyo mejorar la ejecución de la ley de dependencia e incrementar el fondo de inmigración.

IU-ICV también reivindica su "carpeta social" con cuestiones como elevar los impuestos a los salarios más altos o establecer un límite de renta familiar para acceder al ordenador portátil para los alumnos, propuesto por el presidente del Gobierno.

El PSOE se limitó a indicar a los grupos de izquierda que estudiará sus propuestas. Posiblemente, los socialistas opten, respecto a sus resoluciones, por no detallar en exceso para tratar así de facilitar los acuerdos. El plazo para llegar a los mismos se ha fijado en el próximo lunes por la tarde. En paralelo, los populares buscarán alcanzar todo tipo de alianzas. Ayer mismo dirigentes del PP mantuvieron contactos con ERC.

EL AUTOMOVIL Tampoco le será sencillo al Gobierno aprobar la ayuda directa de 2.000 euros para la compra de un automóvil. CiU, ERC e IU-ICV ya han planteado objeciones, como que no se obligue a las autonomías a aportar necesariamente 500 euros, que se amplíe el plan a motocicletas y vehículos industriales y agrícolas, y que entre en vigor de forma retroactiva con el objetivo de evitar anulaciones de demanda en los concesionarios.