El PSOE ha emitido este martes, un día antes del aniversario de la Constitución española, un documento en el que vuelve a insistir en la necesidad de reformar la ley fundamental. El apartado territorial de su propuesta de modificación (para caminar hacia el federalismo) es el que más atención ha concitado, pero los socialistas dejan esta vez a un lado ese enfoque, centrándose en los nuevos derechos que debería reconocer la Carta Magna. Entre otros, el matrimonia entre personas del mismo sexo, la muerte digna y la laicidad del Estado.

“Desde el mismo espíritu de concordia, de amistad cívica y de consenso que presidió en 1978 la elaboración de nuestra Constitución, convocamos de nuevo a los partidos políticos, a las instituciones, a los agentes económicos y sociales, a las universidades y centros de investigación y al conjunto de los ciudadanos y de la sociedad civil, para impulsar en los próximos tiempos un diálogo leal que, desde el trabajo colectivo, nos lleve a un renovado acuerdo que piense en un futuro mejor para todos; un nuevo Pacto para una nueva y mejor España, abierta, inclusiva, civil, europea y cosmopolita; una España que mire al siglo XXI y que se enfrente a los nuevos desafíos con éxito, con vocación integradora, garantizando un marco estable de convivencia para, al menos, otros 40 años más”, señala el texto, que omite cualquier referencia a las recetas territoriales del PSOE, como el reconocimiento de la plurinacionalidad de España y el blindaje de las competencias autonómicas.

“En el ámbito social, la categorización como principios rectores de lo que hoy una mayoría ciudadana considera plenos derechos sociales, exige respuestas nítidas y avanzadas. Considerar el derecho a la salud como un auténtico derecho fundamental obedece a esta filosofía, una idea que también está presente en la necesidad de incrementar las garantías constitucionales de las personas con discapacidad o de la dependencia. En el marco de los derechos fundamentales actualmente reconocidos como tales, profundizar y fortalecer el derecho a la intimidad, el honor y la propia imagen, reconociendo el derecho al olvido en el contexto de internet, nuevas tecnologías y redes sociales, constituye una exigencia propia de nuestro tiempo”, continúa el documento, que considera “preciso transitar desde la no confesionalidad a la laicidad del Estado, con una reformulación de lo dispuesto en el texto vigente”.

“La España de hoy, que ha interiorizado la igualdad entre hombre y mujer como un principio irrenunciable de nuestra sociedad, aspira, del mismo modo, a una mejora de los instrumentos de protección y ampliación de la misma desde enfoques diversos, como la plena inserción en el ámbito laboral en condiciones de igualdad retributiva y efectiva o el compromiso cívico e institucional en la lucha contra la violencia de género. Nuestra norma fundamental debe reconocer aspectos esenciales plenamente asumidos por la ciudadanía, como el matrimonio igualitario o el reconocimiento de los derechos de los colectivos LGTBI, incorporando a su acervo lo que ya ha sido asumido de facto por la sociedad española. Y abordar con valentía la constitucionalización del derecho a la muerte digna”, concluye el escrito del PSOE.