La dirección del PSOE tiene en su inmediato horizonte una fecha que celebrar. En las próximas semanas, el Parlamento vasco elegirá al socialista Patxi López como lendakari, y para José Luis Rodríguez Zapatero ese día supondrá un cambio político de gran trascendencia. Lo explicitó ayer en una reunión con diputados, senadores y europarlamentarios socialistas en el Congreso, a los que anunció otra decisión de gran importancia, la elección de Eduardo Madina como secretario general del grupo parlamentario del PSOE en sustitución de Ramon Jáuregui. "Todos nos tenemos que sentir muy orgullosos de él", aseguró.

Es una apuesta por un joven valor, un socialista vasco de 33 años, que sufrió en febrero del 2002 un atentado de ETA, con una bomba lapa en su vehículo que le acabó segando una pierna. Zapatero quiso enlazar ayer esos dos hechos, como una prueba del "coraje" de la familia socialista, después de que la banda terrorista haya amenazado al próximo Gobierno de Euskadi.

La respuesta del conjunto de los parlamentarios del PSOE fue expresiva: una cerrada ovación, que llevó al propio presidente del Gobierno a considerar que esta vez sí parecía que había acertado con su decisión. Y es que en el grupo socialista en el Congreso se cuestionó al inicio de la legislatura, hace un año, la elección del exministro de Defensa José Antonio Alonso como presidente y portavoz del grupo, mientras que Ramon Jáuregui, un experimentado negociador y veterano dirigente del PSE, ocupaba la secretaría general del grupo. Alonso tendrá como número dos a Madina, en un momento en el que el PSOE carece de apoyos parlamentarios.

Madina, diputado por Vizcaya y miembro de la ejecutiva del PSOE, representa un socialismo abierto, de convicciones, pero propenso al diálogo con los nacionalistas. La elección de Madina representa una muestra de confianza y de lealtad al socialismo vasco, después de la salida de Jáuregui, que será el número dos en la lista de las elecciones europeas, por detrás de Juan Fernando López Aguilar.