Francisco Fuentes, portavoz del PSOE extremeño, asumió ayer que Juan Carlos Rodríguez Ibarra erró al atribuir a un complot la información de que el presidente de Extremadura había hecho llegar a Zapatero su deseo de no renovar su cargo en la ejecutiva del PSOE. "Si alguien ha contado una mentira a alguien, se la ha contado", zanjó Fuentes

Ibarra aseguró anteanoche en la cadena SER que existe una "conspiración de medios de comunicación, controlados desde Cataluña", que persigue acallarlo por su oposición al nacionalismo. Respondía así a las preguntas sobre las informaciones de este diario y La Razón, que decían que sus diferencias con la línea del PSOE sobre la reforma del Estatuto catalán le llevaban a querer dejar la ejecutiva.

Ibarra calificó las noticias de "inventadas" y construyó una teoría de la conspiración para justificar la invención. Según dijo, él es "víctima de una caza y captura" en la que participan Planeta (propietaria de La Razón ) y Zeta (grupo editor de este diario). El consejero catalán Joan Saura también participaría en el complot en nombre del tripartito, ya que aplaudió la posible salida de Ibarra de la ejecutiva y le calificó como "político marginal". "Alguien ha hecho esa información, alguien la ha vendido y alguien la ha comprado para usarla contra mí", concluyó el líder extremeño.

Ibarra recibió ayer una carta de la redactora de este diario que elaboró la información en la que le aclara que fue uno de sus más estrechos colaboradores --el director general de Relaciones Informativas de la Junta de Extremadura, Antonio Blázquez-- la fuente que filtró el deseo de Ibarra de no repetir como miembro de la ejecutiva.