PSOE y PP, con el apoyo de organizaciones como el Foro Ermua y la AVT, se posicionaron en contra de D3M, la nueva plataforma de la izquierda aberzale presentada ayer, mientras la mayoría de los partidos vascos defendieron su derecho a estar presentes en las próximas elecciones.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, reclamó al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que impida que "ETA esté en el Parlamento vasco" y advirtió de que, de lo contrario, le exigirá responsabilidades. El candidato popular a lendakari, Antonio Basagoiti, añadió que la presentación de la nueva plataforma constituye la "prueba del algodón" del cambio de política antiterrorista, al considerar que D3M es "el mismo perro con distinto collar".

Desde las filas socialistas, el portavoz del PSE, Rodolfo Ares, expresó que la nueva lista parece un "intento" de sustituir a partidos ilegalizados, para buscar "el victimismo" y aglutinar "a su gente". Y el secretario de libertades públicas del PSOE, Alvaro Cuesta, aseguró que el Gobierno no tolerará que "los afines al terrorismo" intenten aprovechar los "huecos" del sistema para luego "bombardearlo".

Por el contrario, los líderes de Eusko Alkartasuna, Ezker Batua (la marca vasca de Izquierda Unida) y Aralar mostraron su deseo de que D3M esté presente "con normalidad" en las elecciones, porque representan a un amplio sector social en Euskadi.