Las críticas que vertió el secretario de organización del PSOE, José Blanco, sobre Carlos Gómez Arruche han situado en el disparadero al máximo responsable de la Guardia Civil. No obstante, ayer el PSOE, a través del presidente de la comisión de Justicia, Alvaro Cuesta, matizó que Gómez Arruche ha sido desautorizado por el Gobierno por algunas de sus declaraciones y no por su gestión en el caso Roquetas .

Cuesta matizó que el director general, al igual que toda la cadena de mando del Instituto Armado, "ha estado impecable en la investigación y depuración de responsabilidades" en el caso de la muerte de un ciudadano en el cuartel de Roquetas en el mes de julio. El diputado socialista recordó que Gómez Arruche no tiene experiencia política y "probablemente fue víctima de esa inexperiencia a la hora de pronunciarse y de expresarse en términos periodísticos" en sus primeras declaraciones, que ya fueron "claramente desautorizadas" en su día por el ministro del Interior, José Antonio Alonso.

El PP volvió a pedir ayer la cabeza de Gómez Arruche, pero fue más allá al advertir de que las responsabilidades por el caso Roquetas no se agotan en él y apuntó directamente al ministro del Interior, José Antonio Alonso. El responsable del área económica del PP, Miguel Arias Cañete, aseguró que "la falta de idoneidad" de Arruche imposibilita que ocupe el cargo. Pero el exministro agregó que Alonso "tendrá que asumir igualmente las responsabilidades políticas que le incumben".

"TOCADO" El portavoz de CiU en la comisión de Defensa del Congreso, Josep Maldonado, aseguró que Arruche ha quedado "muy tocado" tras las declaraciones de Blanco, por lo que instó al Gobierno a decir si le mantiene en el cargo. Para el líder de IU, Gaspar Llamazares, las críticas del PSOE hacen "aún más lógico" su cese. IU ya pidió este relevo en cuanto estalló el caso Roquetas .