Las acusaciones del secretario general del PP, Angel Acebes, al Gobierno por la gestión del caso Roquetas han indignado al PSOE. El número dos del PP reprochó el sábado a José Antonio Alonso, ministro del Interior, su "falta de coraje para defender a la Guardia Civil".

Según Acebes, el ministro "tenía que haber dado información de este caso para separar las responsabilidades personales de una actuación ejemplar y permanente de la Guardia Civil a lo largo de mucho tiempo". Por último, acusó a Alonso de haber impuesto "el silencio donde debería haber habido transparencia y haber dado la cara".

Ayer, el secretario general del PSOE en el Congreso de los Diputados, Diego López Garrido afirmó que las declaraciones de Acebes "constituyen un auténtico escándalo".

López Garrido difundió un comunicado en el que criticó que el dirigente popular haya interrumpido sus vacaciones para atacar al Gobierno "sin hacer una sola referencia a la muerte de una persona que acudió a un cuartel en busca de protección, sin hacer una condena de esos hechos, sin hacer alusión a los maltratos que se infligieron a este ciudadano, ni referirse a la necesidad de investigar el caso y solucionar este tipo de conductas".

EL HONOR DEL CUERPO Asimismo, Diego López Garrido emplazó al secretario del PP a que explique si el honor del cuerpo se defiende "tapando acontecimientos tan graves o no persiguiendo la vulneración de derechos fundamentales, como es el derecho a la vida". El dirigente socialista añadió que Acebes tiene que decir "si piensa que el teniente Rivas representa a la Guardia Civil o más bien la representan quienes, cotidianamente, en ese Cuerpo aplican la ley, y quienes impidieron el ocultamiento de estos acontecimientos en el cuartel de Roquetas y lo comunicaron a sus superiores y al Gobierno".

DEFENSA DE BONO Por otro lado, en una entrevista concedida a El País , el ministro de Defensa, José Bono, respaldó la gestión del director de la Guardia Civil, Carlos Gómez Arruche, y resaltó que los hechos se conocieron porque los mandos "tuvieron interés en esclarecerlos". Con la gráfica expresión "ningún garbanzo negro tiñe un buen cocido", Bono aseguró que el cuerpo mantiene "intactos el prestigio y la confianza", y exigió para los agentes implicados la presunción de inocencia.

Bono defendió que la naturaleza militar de la Guardia Civil es "para garantizar la seguridad y vertebrar la presencia del Estado en todo el territorio".