Pese a que la recesión económica sigue al galope, el PSOE recupera la supremacía electoral y vuelve a superar al PP en la estimación de voto. No cabe duda de que en el ánimo de los españoles encuestados ha pesado más las crisis de corrupción que están viviendo los populares que las razones económicas que afectan a todos. No obstante, pese a esa recuperación, los socialistas no pueden echar las campanas al vuelo porque casi todos los indicadores les son desfavorables.

Según la encuesta de GESOP, el PSOE obtendría el 41% de los votos (ocho décimas más que en el barómetro del 2 de noviembre del 2008, y 2,6 puntos menos que en las elecciones del 9-M). A esto se añade una caída de casi tres puntos en la estimación para el PP (el 38,5% frente al 41,3%) respecto a noviembre y de casi un punto sobre marzo del 2008.

EL ABANICO DE ESCAÑOS Con estos datos, los socialistas obtendrían entre 161 y 164 escaños y los populares, entre 154 y 156. El PSOE cuenta ahora con 169 diputados y el PP, con 154. La recuperación del PSOE en las últimas semanas no se debe tanto a los méritos del Gobierno por la gestión de la crisis económica como al desprestigio que se inflige el PP por los casos de corrupción.

La encuesta constata un avance sustancial de IU. Esta formación e ICV, con casi el 5% de espectativas de voto, obtendría entre cuatro y cinco diputados, frente a los dos que tiene tras su hundimiento en las elecciones de marzo pasado.

El partido de ámbito estatal que da la campanada es el de la exsocialista vasca Rosa Díez, Unidad, Progreso y Democracia (UPD), que cuadruplica el resultado del 9-M y obtendría entre 3 y 5 diputados (ahora cuenta con un escaño). El ascenso de UPD es, posiblemente, otra de los motivos de la caída del PP, que es la formación a la que Díez disputa espacio electoral.

POCOS CAMBIOS Los partidos de ámbito autonómico quedan casi como estaban, con la posibilidad de ligeras variaciones: CiU, aun con dos décimas menos en estimación de voto respecto al 9-M, se quedaría con los 10 escaños actuales o añadiría otro. El PNV quedaría igual (seis diputados) y ERC podría perder uno de los tres actuales. Las formaciones regionales y nacionalistas minoritarias sumarían en total entre cinco y seis escaños.

La subida del PSOE en estimación de voto se corresponde también con un ascenso aún superior en la intención directa de voto --aquella que confiesan los encuestados dirigida a los partidos y que se refiere a todo el censo-- respecto a noviembre pasado, frente a una bajada de casi cuatro puntos en la intención de voto que logra el PP. No obstante, esos datos positivos contrastan con otros: la opinión sobre la actuación del Gobierno sigue su ascensión negativa, con seis puntos por encima de la de noviembre. Peor parada sale la opinión sobre la oposición del PP, con 50 puntos de diferencia entre los que la consideran mala o muy mala y quienes la califican de buena o muy buena.

LA FIDELIDAD En cuanto al índice de fidelidad, los populares pierden 3,5 puntos de sus antiguos electores, mientras el PSOE recupera 2,4. El grado de confianza con el PSOE está en el 25,9%, y el de desconfianza, en el 42,4%, este último en aumento. Pero peor le va al PP, con el grado de confianza del 18,3% y el de desconfianza en el 54,4%.