Ocho de los nueve detenidos ayer en San Sebastián en el transcurso de los incidentes registrados cuando la Ertzaintza impidió una manifestación prohibida en favor de los presos de ETA han quedado en libertad, mientras que el portavoz de Askatasuna, Juan Mari Olano, deberá declarar ante la Audiencia Nacional. Según informó la portavoz de la organización de apoyo a los reclusos de ETA Oihana Agirre, quien ofreció hoy una rueda de prensa ante la sede central del PNV de San Sebastián, todos los arrestados ayer quedaron hoy en libertad con la obligación de acudir al juzgado cada 15 días, aunque Olano volvió a ser arrestado por orden de la Audiencia Nacional.

El dirigente abertzale debe acudir mañana a declarar ante la Audiencia Nacional, ya que el juez Baltasar Garzón ha ordenado que comparezca en su juzgado después de que lo solicitara la Fiscalía, que podría pedir su ingreso en prisión por reincidir en delitos por los que ya está procesado y vulnerar la suspensión de actividades de Askatasuna. La Consejería de Interior precisó que Olano también fue puesto en libertad por el juzgado donostiarra, pero que fue detenido de nuevo inmediatamente para cumplir la orden dictada por el juez Garzón.

Askatasuna busca responsables de los incidentes

La portavoz de Askatasuna, quien compareció acompañada por varias personas heridas en los incidentes y por alguno de los arrestados, afirmó que, además de los contusionados, una persona se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos de un centro hospitalario donostiarra debido a un ataque al corazón que, según aseguró, sufrió durante los enfrentamientos con la Ertzaintza. La representante del colectivo de apoyo a los presos de ETA responsabilizó a "todo el PNV" de los incidentes, y en concreto al consejero de Interior, Javier Balza, al que acusó de "planificar" los altercados al "enviar a dos centenares de ertzainas a sembrar el pánico" entre los ciudadanos.

Agirre afirmó que los incidentes de ayer responden al guión diseñado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PNV, Josu Jon Imaz, tras lo que reclamó a la formación nacionalista que "deje de servirse de la represión como herramienta política". Por este motivo, Askatasuna ha convocado concentraciones de protesta el próximo jueves ante todas las sedes del PNV en el País Vasco. Durante los incidentes resultaron heridas al menos once personas, la más grave un ertzaina que sufrió cortes en el cuello causados por una botella de cristal, quien quedó ingresado en el Hospital Donostia y ha sido dado de alta esta mañana.