Los gobiernos español y marroquí reforzarán la seguridad de la operación Paso del Estrecho --un punto por el que este año transitarán casi tres millones de personas--, ante el temor de que haya un atentado de extremistas. Marruecos impuso el pasado fin de semana la alerta máxima antiterrorista ante las "gravísimas" amenazas recibidas.

El anuncio lo hizo ayer en rueda de prensa el ministro de Exteriores, Miguel Angel Moratinos, que compareció con el ministro delegado de Exteriores marroquí, Taieb Fassi Fihri, después de una reunión en Madrid entre las autoridades de ambos países. Moratinos aseguró que el Gobierno español no tiene "datos" concretos sobre la posibilidad de un atentado por parte de radicales en alguno de los dos países, pero señaló que "la situación que vive el mundo" y los "incidentes" del Líbano --donde murieron seis militares españoles-- y Yemen --donde fallecieron siete turistas-- aconsejan "reforzar todas las medidas de seguridad".

Según fuentes diplomáticas, el Gobierno de Marruecos pidió una reunión urgente a las autoridades españolas. El encuentro celebrado ayer estaba presidido por la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, y contó con el ministro del Interior marroquí, Chakib Benmussa, así como con el ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba. Ambos ejecutivos abordaron, por primera vez, la operación Paso del Estrecho desde el punto de vista antiterrorista.

La Guardia Civil ya procedió el mes pasado a reforzar los puertos de Algeciras y Alicante.