El líder del PP, Mariano Rajoy, amplificó ayer los ecos del desencuentro con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en su entrevista del pasado lunes en la Moncloa. Rajoy acusó a Zapatero de querer "aislar" al PP y de pactar los grandes temas de Estado "con partidos radicales y nacionalistas" (en alusión a ERC, PNV e IU), con lo que rompe la tradición de acordar estos asuntos con el principal partido de la oposición. Sobre el Estatuto catalán, el líder de la oposición afirmó que Zapatero y Pasqual Maragall pretenden aprobar un texto que "liquida" el Estado.

Rajoy, tras señalar que en la cita del lunes "no pasó nada", recordó que "no hay reforma de estatuto ni de la Constitución" que no haya sido pactada por el PP y el PSOE "desde 1978", año en que se aprobó la Carta Magna.

SIN POSIBILIDAD DE PACTO Por ello, el presidente del PP lamentó que Zapatero pretenda pactar ahora todos los asuntos con ERC, una formación "a la que no le importa España". Ante tal situación, negó la posibilidad de cualquier acuerdo con el PSOE, pese a reconocer minutos antes en la misma entrevista en la COPE que el lunes había ofrecido "un pacto de Estado sobre el modelo territorial".

Respecto al Estatuto catalán, recalcó que es "imposible" que él dé su visto bueno al texto que apruebe el Parlamento autonómico, ya que tanto a Zapatero como al presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, "les importa un comino el contenido" del texto. Señaló que "lo que quieren es presentarse ante la opinión pública con un papel que ponga: reforma del Estatut".

De hecho, el teórico encargado de opinar sobre los avatares del Estatuto catalán era el presidente del PP en Cataluña, Josep Piqué, quien lo hizo en la sede de los populares en Madrid, donde se encontraba para ir al Senado. Piqué insistió en que Zapatero y Maragall han llevado este debate a "un callejón sin salida".

Piqué dejó claro que el PP votará muy probablemente en contra del Estatut en el Parlamento de Cataluña al señalar que, ni siquiera aunque se subsanasen puntos inconstitucionales, el texto sería asumible desde el punto de vista político.

CAMBIOS INTERNOS Rajoy negó que tenga intención de reorganizar su partido. Insistió en que no va "a cambiar" a Angel Acebes como secretario general del PP y a Eduardo Zaplana como portavoz parlamentario, al tiempo que expresó su apoyo a Josep Piqué, quien este verano vinculó a esos dirigentes "al pasado". Según Rajoy, Piqué "lo está haciendo muy bien".

El dirigente socialista Alfredo Pérez Rubalcaba reaccionó a las críticas de Rajoy. Afirmó que es "muy complicado" ponerse de acuerdo con los populares en asuntos de Estado porque "el PP ha decidido que su oposición se base precisamente sobre este tipo de asuntos".