Mariano Rajoy, presidente del PP, mantuvo ayer su frente abierto contra el Gobierno en materia económica y reclamó a José Luis Rodríguez Zapatero que "gobierne y tome decisiones" porque, según Rajoy, el presidente del Gobierno no debe ser solo un "comentarista de lo que pasa en el mundo", sino que debe tomar decisiones en beneficio de los españoles. "Hasta ahora, la única decisión que ha tomado es aumentar el gasto público en altos cargos de la Administración y en otras cosas que no interesan a nadie", dijo.

Rajoy destacó que el Gobierno tiene la obligación de apretarse el cinturón al igual que "lo están haciendo los españoles". Añadió que Zapatero huye de su responsabilidad ante la crisis y se escuda en la situación internacional. En este sentido, censuró las críticas vertidas por el jefe del Ejecutivo el sábado contra el presidente del Banco Central Europeo, a quien Zapatero pidió "prudencia" y "responsabilidad" en sus manifestaciones, a raíz de las cuales el euríbor llegó hace tres días a su máximo valor.

El líder del PP reconoció que ha vivido momentos muy duros durante estos días en su partido y ha visto "cosas que no son propias del PP", pero aseguró que está más convencido y más fuerte para liderar la nueva etapa del PP. Explicó que su modelo de partido es "de centro y unido". "Quiero que sea como el PP de Murcia", afirmó, en un guiño a sus interlocutores en un acto en Puerto Lumbreras (Murcia).

Respecto al congreso nacional que se celebrará en Valencia, dijo que está dispuesto a hablar y dialogar con todos sin excepción, pero lo que no puede hacer es "hablar con quien no quiere hablar con él".

Ramón Luis Valcárcel, presidente de Murcia, le ratificó su apoyo sin fisuras porque "la región de Murcia ha sabido entender todo lo que ha hecho Mariano Rajoy por ella".