A Mariano Rajoy no le gusta la guerra de poder que se está llevando a cabo en el seno de Caja Madrid. Y mucho menos que la presidenta de la comunidad, Esperanza Aguirre, desoiga sus directrices para que abandone las maniobras iniciadas con el fin de apartar de la caja a su responsable, Miguel Blesa. Por eso, Rajoy ha decidido llevar el asunto al Congreso y defender una iniciativa legislativa para "despolitizar" las cajas y, de paso, dotar de capacidad al Banco de España para su control.

Si se aprobara esa medida --está por ver qué votarán los socialistas, que dicen que no opinarán hasta ver el texto--, la estrategia de Aguirre quedaría en entredicho. La presidenta de Madrid ha llegado a cambiar la ley de cajas para, gracias a su mayoría en el organismo, forzar la salida de Blesa, que cuenta con el apoyo del alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón.