El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy, en la rueda de prensa en la que ha hecho balance político del 2010, que su partido va a apoyar al Gobierno en todo lo que sea bueno para el interés general de los españoles y ha asegurado que el PP estará a la altura de las circunstancias. A juicio de Rajoy, España no puede permitirse que el 2011 sea, como a su juicio ha sido el 2010, un año perdido de cara a la recuperación económica.

Pese a su gesto de mano tendida, el líder de la oposición se ha mostrado convencido de que "hace falta un profundo cambio en España" para que todo pueda mejorar, sobre todo después de "muchos años de inacción" o de "ir en direcciones equivocadas". A juicio de Rajoy, "no hay confianza posible cuando la crisis no se explica" y se "reacciona con medidas inconcretas o atropelladas o impuestas desde fuera".

El líder popular se ha mostrado convencido de que España puede mirar al futuro con confianza porque existen "recursos humanos" y hay un capital construido en las últimas décadas de andadura democrática y una sociedad fuerte que "no se resigna a la decadencia". En este sentido, ha subrayado que en España hay "buenos emprendedores, excelentes empresas" y ha comentado que las cosas funcionan "cuando hay un gobierno que genera las condiciones necesarias, como se ha demostrado recientemente", en referencia a los años de Gobierno de su partido.

SOLO PALABRAS

Para Rajoy, el 2010 ha sido "el año de los recortes sociales" y ha recordado que hace un año el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, manifestó que este año sería el de la recuperación económica. Según ha dicho, sus promesas se han quedado "en palabras" como "tantas otras veces".

"Ha sido el año en que más españoles han perdido su puesto de trabajo, en el que han subido los impuestos, ha sido el año de los recortes sociales. Ha sido el año de mayores dificultades para las familias y en el que se ha cuestionado nuestra deuda pública", ha afirmado, para añadir que el año termina con una subida de precios.