Rajoy no podía faltar a la traca final de la campaña del PP de Galicia. Ha estado en la comunidad mucho más tiempo de lo previsto, duplicando esfuerzos con el candidato Alberto Núñez Feijóo. En la campaña, Feijóo se dedicó más a las zonas urbanas, mientras que Rajoy peleó por el voto en la Galicia interior, recorriendo pueblos de las provincias de Ourense y Lugo, en las que hay más en juego. También tuvo cierta presencia en Pontevedra, de donde es originario. El caso es que ambos han recorrido varias veces Galicia, pero prácticamente no se han visto.
Ayer sí lo hicieron, en el último mitin antes de las elecciones en Ourense, y también coincidieron en la dureza de los mensajes. Y eso que Feijóo tuvo que disculparse públicamente ya por la mañana por las declaraciones que uno de los viejos barones, José Luis Baltar, hizo en un mitin sobre la vida del cabeza de lista del BNG, Anxo Quintana.
UNA PALIZA Eso no fue obstáculo para que Rajoy se mostrase beligerante. Para muestra, la definición que hizo del Gobierno bipartito gallego. "Ha sido el peor de la historia de Galicia", dijo, y añadió: "No ha habido nunca uno peor. Son unos mantas y hay que cambiarlos. Vamos a volver a ganar y les vamos a dar una malleira paliza, en gallego porque necesitamos 38 diputados", aventuró.
Abundando en la línea dura, Rajoy recordó los episodios que considera más truculentos en sus rivales. A Touriño le acusó de "dilapidar el dinero de los gallegos" por gastar en su coche oficial "más que el presidente de EEUU", Barak Obama; a Quintana le criticó por "engañar" a los mayores para que fuese a un mitin suyo; e incluso tuvo reproches para el secretario de los socialistas, José Blanco, al que pidió que explique "qué está haciendo en la isla de Arousa, con su superático y con villa PSOE".
Se guardó alguna bala en la recámara para el Gobierno central: "Los socialistas --dijo-- son un peligro para administrar la economía y una máquina de generar desempleo. Cuanto más tiempo estén en el Gobierno, en Madrid y en la Xunta, más tarde se saldrá de la crisis".
VIDEO FANTASMA La figura del presidente nacional del PP estuvo a punto de eclipsar a la del candidato. De hecho, estaba preparado un vídeo de minuto y medio en el que Rajoy acaparaba todo el protagonismo mientras que Feijóo aparecía apenas tres segundos. El vídeo reivindicaba la figura de Rajoy porque "es gallego" y "ama a Galicia", mientras que "algunos venden Galicia". Al final, los organizadores gallegos evitaron la emisión del vídeo y Rajoy le dio más protagonismo a su candidato.
