La reina Sofía utilizó la semana pasada en dos ocasiones los vuelos de la compañía de bajo coste Ryanair para volar entre Santander y Londres, donde está hospitalizado su hermano Constantino de Grecia por una operación de corazón. El hecho adquiere relevancia en plena controversia por el uso de los Falcon que hace José Luis Rodríguez Zapatero.

Sofía se desplazó a la ciudad londinense el jueves pasado para estar con su hermano el día siguiente, cuando fue sometido a una intervención quirúrgica para reemplazarle una válvula coronaria y desbloquearle una arteria. El sábado tenía que asistir al desfile del Día de las Fuerzas Armadas, que se celebró en Santander, y eligió un vuelo de Ryanair, la aerolínea que conecta directamente las dos ciudades. "Era la mejor opción que tenía", explicaron ayer fuentes de la Casa del Rey. El domingo, tras presidir junto al Rey el homenaje a la bandera y a los caídos, volvió a subirse a un avión de esa compañía para alcanzar Londres.

Fuentes de la Casa del Rey explicaron que es "normal" que en los "viajes privados" tanto la Reina como los Príncipes y las infantas utilicen vuelos regulares. "El único que siempre viaja en un avión militar es el Rey", añadieron. Esas mismas fuentes descartaron que la información de este caso concreto haya tenido origen en la Casa del Rey y recordaron que Ryanair ha realizado agresivas promociones comerciales en los últimos años.

NUEVA ACUSACION El PP sigue manteniendo la polémica de los Falcon como uno de los ejes de su campaña al Parlamento Europeo. En su argumentario de ayer, los conservadores aseguran que el PSOE "oculta" que su candidato, Juan Fernando López Aguilar, y la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega volaron a Valencia en el avión militar el 23 de mayo para un mitin. "Mientras los líderes socialistas van en aviones militares, a sus militantes les llevan en autobús", dice el documento.