Si las empresas españolas apenas se han beneficiado el apoyo del Gobierno del PP a EEUU, el giro político del 14-M no permite presagiar un cambio de tendencia, antes al contrario. La determinación de Zapatero de retirar las tropas de Irak sitúa a España en el eje de la paz junto a países como Francia, Alemania o Rusia, que por su rechazo a la guerra de Irak, han sido vetados por EEUU en el proceso de reconstrucción.
La otra gran incógnita en el horizonte político son las elecciones presidenciales que EEUU celebrará el próximo noviembre, en las que el demócrata John F. Kerry disputa el poder al republicano George Bush. Una victoria demócrata dinamitaría definitivamente el trío de las Azores y forzaría una nueva orientación de la posguerra.
