El Gobierno revocó el viernes la condición de asilado al dirigente opositor de Guinea Ecuatorial Severo Moto, tras "probarse su participación en diversos intentos de golpe de Estado" en su país. La vicepresidenta del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, dijo que el Gobierno considera probado que Moto ha realizado "actividades de planificación y organización de actos violentos en Guinea" que incluyen "la recluta de mercenarios y el tráfico de armas".

El Ejecutivo propondrá a Moto su traslado a un tercer país que ofrezca acogerlo, para evitar su devolución a Guinea, donde pesa sobre él una condena a 61 años de prisión por su supuesta implicación en una intentona contra el dictador Teodoro Obiang.

RECURSO "CON CALMA" Moto, de 62 años, que goza desde 1986 del estatus de asilado, asumió con "calma" la decisión y anunció que la recurrirá. "Un Gobierno socialista me dio el asilo y otro me lo quita", afirmó a este periódico. Antes de que lo lleven a un tercer país, dijo que prefiere regresar a Guinea. Moto considera que es víctima de una nueva política de aproximación de España a Obiang, motivada por la proliferación de yacimientos petrolíferos en la excolonia española.