Los manifestantes detenidos anoche por desórdenes públicos, en apoyo a las protestas que tienen lugar en Grecia por la muerte de un joven de 15 años a manos de la policía, se encuentran prestando declaración en dependencias policiales y pasarán hoy a disposición judicial. Fuentes de la Jefatura Superior de Policía informaron de que se trata de siete personas mayores de edad y dos menores, todos de nacionalidad española, y, además de desórdenes públicos, están acusados de atentado contra agentes de la autoridad.

Los siete mayores de 18 años se encuentran prestando declaración en las dependencias de la Brigada Provincial de Información, en Moratalaz, donde ingresaron ayer, mientras que los dos menores están siendo sometidos a exploración del menor, que es como se denomina el trámite judicial que siguen los menores de edad en dependencias policiales.

Los incidentes producidos en las manifestaciones celebradas la pasada noche en Barcelona y en Madrid de apoyo a las protestas que tienen lugar en Grecia por la muerte de un joven de 15 años a manos de la policía, se han saldado con nueve heridos -tres de ellos policías- y 11 detenidos. En Madrid, tres policías municipales y seis manifestantes han sido atendidos de "carácter leve" por el Samur tras los altercados ocurridos en dicha manifestación, que se desarrolló por las calles del centro de la capital, con eslóganes antipoliciales.

La manifestación de Madrid, en aparente solidaridad con las protestas en Grecia, se inició sobre las 20.20 horas del miércoles y unas 200 personas protagonizaron una marcha por la calle del Carmen, en dirección a la Gran Vía, con pancartas y gritos de 'policía asesina'. En ella se produjeron varios episodios de alteración del orden público y vandalismo contra unas dependencias de la Policía Municipal, que tuvo que ser asistida por efectivos de la Policía Nacional.

En dichas dependencias, situada en la calle Montera, varios agentes resultaron heridos y los cristales rotos, por los manifestantes, cinco de los cuales fueron detenidos.

Después de que agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), los llamados 'antidisturbios', controlaran la situación, los manifestantes se dispersaron por las calles de Toledo, Colegiata y la plaza de Tirso de Molina, donde a su paso prendieron fuego a contenedores, efectuaron pintadas y apedrearon una entidad bancaria en la Ribera de Curtidores. Allí, los 'antidisturbios' detuvieron a las otras cuatro personas acusadas de alterar el orden público.