En el acto que el rey Juan Carlos protagonizó ayer en el Parlamento de Chile, en su primera visita al país tras la crisis por el caso Pinochet , la sombra del dictador estuvo presente. "Sentimos una profunda pasión por la democracia", dijo el Monarca. Y añadió: "La valoramos (la democracia) como algo precioso que nunca puede darse por sobreentendido, sino que debe defenderse cada día". Previamente, Juan Carlos se entrevistó con el presidente chileno, Ricardo Lagos.

Juan Carlos elogió los "ejemplares procesos de transición política" vividos por ese país y por España. El Rey pronunció su discurso en Valparaíso. Entre los asistentes estaba Isabel Allende, hija del presidente asesinado en el golpe de Estado de 1973.