La escena no pasó desapercibida para nadie. Tras el funeral oficiado ayer en la catedral de Palma, a las puertas del templo, los príncipes Felipe y Letizia se acercaron al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y durante unos largos diez minutos hablaron los tres.

Concretamente, la princesa preguntaba casi con insistencia y gesto de preocupación, mientras que el responsable de Interior les daba detalladas explicaciones gestualizando en algún momento y casi asegurándoles que podían estar tranquilos. No se pudo escuchar de qué hablaron, pero la conversación era seguida con atención y a pocos metros por los Duques de Palma y la infanta Elena, quienes se añadieron al grupo y preguntaron también al ministro.

Tanto los colaboradores de Rubalcaba como destacados miembros de la Casa del Rey consultados no dudaron en coincidir en que, con certeza, los príncipes se habían interesado por los detalles de la investigación y sobre la seguridad de la Familia Real en la isla. Los reyes Juan Carlos y Sofía no han variado sus planes y aterrizan hoy en Palma para pasar unas vacaciones, más cortas que en años anteriores, pero sin duda marcadas por el luto del asesinato de los dos guardias civiles a escasos ocho kilómetros del palacio de Marivent, en el que veranean.

Si bien es cierto que nadie duda que el único objetivo de los terroristas en esta ocasión era la Guardia Civil, la proximidad de los miembros de la Familia Real ha puesto en cuestión su hasta ahora férreo sistema de protección y seguridad. "El dispositivo de vigilancia de la Casa del Rey no se verá alterado por el atentado, porque garantiza su seguridad", aseguró ayer el delegado del Gobierno en Baleares, Ramon Socías. Esta fue una de las afirmaciones que en estas últimas 48 horas ha realizado el político para estupor de los responsables de Interior.

EXPLICACIONES INEXACTAS Socías aseguró, a pocas horas de los asesinatos, que ETA había utilizado una bomba lapa accionada con mando a distancia, un dispositivo nunca visto ni utilizado hasta que lo descubrió el delegado. Y ayer, desde la delegación, se aseguró que las fuerzas de seguridad habían identificado a dos de los terroristas, y que estos continuaban en la isla.