El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha admitido hoy que los terroristas responsables del atentado de Mallorca tuvieron tiempo de huir de la isla, si bien no ha descartado que aún puedan permanecer en ella, por lo que se mantiene activado un "extraordinario" dispositivo policial para intentar localizar a los asesinos de los guardias civiles Diago Salvá y Carlos Sáenz de Tejada.

Rubalcaba, que ha pedido al PP que no haga insinuaciones de que el Gobierno socialista se plantea negociar con ETA, ha reconocido que "ya se temía" un atentado como el de Mallorca o el de Burgos cuando se produjeron las últimas detenciones. "Esto estaba, por tanto, previsto. Cuando detuvimos a los dos presuntos etarras en Francia hace unos semanas, expresamente dije cuidado, cuidado, cuidado, porque nos temíamos que algo así pudiera llegar a pasar", ha apuntado.

Rubalcaba ha insistido en que su Ministerio trabaja en las dos hipótesis, la de que huyeron y la de que siguen en la isla, pero ha reconocido que tuvieron tiempo para abandonar la isla. "Qué duda cabe de que se han podido ir porque tiempo han tenido. Creemos que sí, pero las dos hipótesis están sobre la mesa", ha dicho.

El ministro, que ha confirmado que los terroristas que acabaron con la vida de los dos guardias civiles utilizaron una bomba lapa con temporizador, ha afirmado que su departamento no tiene ninguna prueba que insinúe que ETA tiene algún tipo de infraestructura en Mallorca. "Es más fácil imaginar que han llegado como turistas, se han alojado como turistas y se han ido como turistas", ha afirmado.

Rubalcaba ha dicho que también desconoce si el atentado de Mallorca fue cometido por un terrorista o por varios, aunque ha recordado que los etarras no suelen ir solos. Asimismo, ha manifestado que no ha recibido ninguna información por parte de la policía y Guardia Civil de que el ataque lo perpetró una pareja tras recoger una bomba lapa en un zulo, como se apunta hoy en algún medio de comunicación.

INTENTO DE ROBO

En cuanto a si alguno de los terroristas que aparecen en el cartel que distribuyó su Ministerio hace unos días podría ser el autor del atentado de Mallorca, Rubalcaba lo considera una posibilidad, aunque tampoco la ha dado por seguro. Lo que sí ha señalado es que las seis personas que aparecen en el cartel --Itziar Moreno Martínez, Iratxe Ortiz de Barrón, Alberto Machain Beraza Gogorza, Oroitz Gurruchaga, Joanes Larretxea Mendiola e Ivan Saez de Jauregui Ortigosa-- son las personas que se cree que en estos momentos trabajan para ETA desde el interior de España.

Preguntado por el intento de robo ayer de una furgoneta en Valencia, Rubalcaba ha señalado que se está investigando "a fondo" el suceso, aunque se desconoce si tiene relación o no con el atentado de Mallorca o con ETA. "No tenemos ninguna prueba de que esté relacionado, aunque lo estamos investigando como si la tuviera", ha dicho.

NO HAY SITIO PARA EL DIÁLOGO

Rubalcaba se ha mostrado "absolutamente seguro" de que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado detendrán a los responsables del atentado de Mallorca y de que lo harán "más pronto que tarde". Eso, ha dicho, es lo que les ha dicho a las familias de los dos guardias civiles asesinados.

El ministro ha lanzado además sendos mensajes a ETA y a Batasuna. A la banda le ha advertido de que su final "no va a ser dialogado" y de que "o lo dejan" o las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, los jueces y los fiscales "se lo harán dejar". A Batasuna, por su parte, le ha avisado de que "nunca" estará en las instituciones mientras no abandone las armas "definitiva, incondicional y unilateralmente".

MAYOR PREVENCIÓN

El ministro ha afirmado que "cuantas más detenciones se producen" más necesita hacer algo ETA para decir al mundo que no están derrotados y para intentar convencer a los que dudan de la violencia dentro de la banda, y que "cada vez son más", de que con ella se consiguen sus objetivos.

"Por paradójico que resulte, cada detención supone una mayor prevención y una mayor preocupación", ha explicado Rubalcaba, que ha advertido de que "cuantos más débiles son, más asesinos pueden llegar a ser".

En este sentido, ha manifestado tener la sensación de que cada relevo que se produce al frente de la banda "va a peor", porque "el que viene es más asesino si cabe y sobre todo más enloquecido" que el anterior. "Tenemos que tener la guardia alta, la confianza de que estamos haciendo todo lo posible, pero la seguridad también de que nos puede pasar cualquier cosa. Y esa es la gran paradoja de que la lucha contra ETA, y es esperanzadora, y me cuesta decirlo hoy porque llevo estos asesinatos encima como una losa", ha concluido Rubalcaba.