El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha asegurado hoy que el presupuesto de su departamento para 2011 es austero pero suficiente para atender sus programas de gastos y sus objetivos para el próximo año. Así lo ha indicado el ministro en el pleno del Congreso durante el debate del proyecto de presupuestos generales, en el que el grupo socialista ha anunciado que no admitirá las enmiendas presentadas por los grupos parlamentarios. El proyecto de presupuestos para el próximo año asigna a Interior un total de 8.401,92 millones de euros, una cifra un 5,3 por ciento inferior a la de 2010 y que se traduce en 470,89 millones menos. Según Pérez Rubalcaba, estos presupuestos son suficientes para los objetivos de su departamento: seguir bajando las tasas de criminalidad, combatir con eficacia el terrorismo y el crimen organizado, atender a la población penitenciaria y la seguridad vial. El PP, según su portavoz en Interior, Ignacio Cosidó, ha opinado lo contrario y por eso ha defendido una enmienda a toda la sección en la que se pide un aumento de 10 millones de euros en la dotación para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad el Estado (FCSE), al considerar que los presupuestos en esta materia supondrán un descenso de la seguridad ciudadana que -ha dicho- se hipoteca a largo plazo. Cosidó ha considerado que una oferta de empleo público "raquítica" junto a la nueva reglamentación de los horarios y permisos de la Guardia Civil será equiparable a una pérdida de 10.000 efectivos y ha calificado de "brutal" la caída que experimentan las inversiones. También CiU ha considerado insuficiente el presupuesto de Interior para atender las reivindicaciones salariales y las necesidades de medios materiales de las Fuerzas de Seguridad del Estado. La portavoz de UPyD, Rosa Díez, ha defendido asimismo varias enmiendas sobre equipamientos y dotaciones para las FCSE cuyo coste suponen, ha dicho, "un quinto del conjunto de los acuerdos de carácter económico y político de los que el Gobierno ha llegado con el PNV para mantener vivo el alquiler de la Moncloa durante año y medio más".