Rafael Simancas, el líder de la Federación Socialista Madrileña (FSM), aseguró ayer que la querella presentada por la Fiscalía de Madrid por un pelotazo en Alcorcón demuestra que la trama de constructores presuntamente corruptores de los dos diputados traidores tenía por objetivo impedir un Gobierno de izquierdas en la comunidad que pusiera en cuestión sus manejos especulativos.

Igual impresión tiene IU, partido que ayer, en la junta de portavoces de la Asamblea (Parlamento regional), propuso crear una comisión de investigación sobre la operación urbanística de Alcorcón. El PSOE lo apoyó y el PP evitó pronunciarse.

"Ahora sabemos el porqué" de la trama organizada, dijo Simancas, que provocó la desaparición de los dos traidores. "Los autores y protagonistas de la trama sabían que yo pararía esa operación". "Sabían que un Gobierno decente nunca transigiría con una operación fraudulenta", afirmó el candidato socialista.

Sobre la creación de la comisión de investigación existen varias interpretaciones jurídicas. PSOE e IU entienden que la comisión queda constituida cuando lo solicitan dos grupos parlamentarios o dos quintos de la Cámara. El PP entiende que la decisión es de la Mesa de la Asamblea, en la que tienen mayoría.

El fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, dijo que no se pronunciará sobre el informe de Anticorrupción sobre lo ocurrido en la Asamblea "hasta que se hayan resuelto las querellas presentadas".