Los máximos responsables de los sindicatos nacionalistas vascos ELA y LAB, José Elorrieta y Rafael Díez, culparon a todas los partidos del parón del proceso de paz, y les reclamaron compromisos que permitan crear la mesa de partidos. En una comparecencia conjunta en San Sebastián tras meses de relaciones distantes entre ambas centrales, Elorrieta pidió al lendakari que concrete su invitación a los sindicatos para participar en el proceso de paz, pero le advirtió de que no cuente con ellos si la meta no es "la acumulación de fuerzas entre formaciones soberanistas".

Díez propuso una "catarsis" en el proceso y criticó que desde la declaración de ETA, hace seis meses, únicamente ha habido "fuegos de artificio". No quiso pronunciarse sobre la verosimilitud de las informaciones que hablan de riesgo de ruptura del alto el fuego, aunque afirmó que la política penitenciaria "de venganza" del PSOE y la "represión" contra la izquierda aberzale "impiden" alcanzar la paz. ELA, LAB, Comisiones Obreras y UGT de Euskadi y Navarra han intentado sin éxito en los últimos meses suscribir un documento conjunto de apoyo al proceso de paz.