José Blanco es la sombra de José Luis Rodríguez Zapatero desde que ambos empezaron a trabajar para que el segundo se convirtiera en líder del PSOE. Lo lograron y desde entonces, Blanco ha sido la mano derecha del líder, pero siempre en una línea alejada de la gestión, una constante en la trayectoria de este hombre de partido nacido en Palas de Rey (Lugo) en 1963, casado y con dos hijos, que se afilió al PSOE en 1978, y que dejó sus estudios de Derecho para convertirse en el secretario de organización del PSG-PSOE.

Senador a los 27 años, diputado en el Congreso a los 34, Blanco se enfrentará ahora por primera vez a la tarea de gestionar la realidad, y en un ministerio como el de Fomento, más propenso que otros a ser observado por la ciudadanía. Que a la tarea de sustituir a la cuestionada Magdalena Álvarez quiera sumar la de seguir llevando el timón del PSOE como su vicesecretario general indica hasta qué punto tiene peso Blanco en el partido de Zapatero.

El presidente del Gobierno tiene por costumbre llamar a Blanco a toda hora para comentar cualquier detalle. Ahora tendrá a su máximo confidente en el Gabinete.