El Tribunal Supremo avaló ayer la detención de dos militantes del PP tras la agresión que sufrió el exministro de Defensa José Bono cuando asistía a una manifestación convocada por la Asociación Víctimas del Terrorismo el 22 de enero del 2005. Por ello, el alto tribunal absuelve a los tres policías que fueron condenados por la Audiencia de Madrid a penas que oscilaron entre los tres y los cinco años de prisión.

La sentencia, cuyo fallo se adelantó el 29 de junio, defiende la actuación policial por tomar declaración a esos militantes "ante la existencia, en principio, de un delito de atentado" contra un ministro en el ejercicio de sus funciones. Los jueces también critican a sus subordinados de la Audiencia de Madrid por haber condenado a los agentes por coacciones cuando no habían sido acusados por ese delito. Sin embargo, el alto tribunal rechaza--como le propuso el fiscal-- ordenar la repetición del juicio por manifiesta parcialidad del tribunal. Por ello, explica que opta por una solución menos lesiva --la absolución-- tras criticar la actuación del presidente, Manuel Hidalgo, que, a su juicio, se extralimitó cuando enjuició a los policías.