El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, ha sido citado a declarar como testigo en la causa que tramita el Tribunal Supremo para averiguar si el juez Baltasar Garzón le pidió dinero para patrocinar dos cursos que organizó durante su licencia de estudios en la Universidad de Nueva York, entre marzo del 2005 y junio del 2006. El presidente del primer banco de España y el cuarto del mundo por beneficios deberá explicar al instructor, Manuel Marchena, por qué el juez de la Audiencia Nacional se dirigió a él en una carta con un "querido Emilio" y se despidió con "un fuerte abrazo".

Garzón aclaró a Marchena que este tratamiento era habitual en las cartas que dirigió a los patrocinadores de esos cursos y a las personas que asistieron a los mismos. Y aportó como prueba otros escritos dirigidos a Rodrigo Rato, Esperanza Aguirre y José Luis Rodríguez Zapatero, a los que también se dirigió con un "querido". El magistrado aseguró asimismo que no le une una relación de amistad con Botín y negó por activa y por pasiva que el Banco Santander hubiera patrocinado su estancia de estudios en Nueva York o se hubiera hecho cargos de sus gastos o de los de su familia cuando acudieron a visitarlo.

La misma tesis ha sido defendida públicamente por Botín, que ha explicado que su banco decidió patrocinar los cursos de la Universidad de Nueva York para mejorar su presencia en Estados Unidos. Esta afirmación la corroboran dos informes aportados por la universidad norteamericana y la entidad financiera, que remitieron un documento al alto tribunal en el que se detallaba el dinero donado y la distribución de los fondos.

Además, el magistrado del Tribunal Supremo ha citado asimismo para el 6 de mayo a los directivos del Banco Santander en Nueva York Gonzalo de las Heras y Rodolfo Icaza. El primero sugirió a Botín que patrocinara los cursos de la Universidad de Nueva York tras mantener un almuerzo con el juez de la Audiencia Nacional porque le parecieron "importantes".

El Tribunal Supremo imputa a Garzón un delito de cohecho y otro de prevaricación. Por ello, quiere aclarar si Botín pagó a Garzón para que archivara una querella contra el banquero que había presentado Rafael Pérez Escolar, uno de los condenados en el caso Banesto.

TESTIGOS Asimismo, el alto tribunal interrogó ayer en calidad de testigo a una de las coordinadoras de los cursos, Mar Bernabé, que negó que fuera contratada por Garzón y confirmó que su salario fue asumido por la institución universitaria, Los otros dos testigos que tendrían que haber declarado ayer, el exdirector de la Universidad de Nueva York, James D. Fernández, y la otra coordinadora de los cursos, Laura Turegamo, serán citados por comisión rogatoria y lo más probable es que acaben declarando por videoconferencia.