El Tribunal Supremo decretó ayer la muerte civil de Sozialista Abertzaleak (heredero de Batasuna) al privarle de todos sus derechos y facultades como grupo parlamentario. Por ello, no podrá actuar como tal en el Parlamento ni cobrar subvenciones.

Los jueces le dicen al presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, que actuó "en contra del Derecho" cuando se negó a ordenar que los diputados del grupo de Arnaldo Otegi pasaran al Grupo Mixto.

Los magistrados de la sala 61, integrada por 16 jueces, ordenaron ayer a Atutxa, a los miembros de la mesa y a los presidentes de las comisiones parlamentarias que "impidan la presencia" de Sozialista Aberzaleak "en actuaciones parlamentarias". Los jueces recapitulan esas actividades, como la elección de lendakari o la presentación de proposiciones de ley. Los jueces advierten de que el incumplimiento de su orden tendrá "responsabilidad penal".

Asimismo, el alto tribunal acuerda el embargo "de cuantas subvenciones o fondos, públicos o privados" pertenezcan al grupo disuelto. Y el comiso de "los saldos de las cuentas corrientes que éste pudiera poseer en cualquier entidad de crédito".

También instan al interventor general de la Cámara vasca para que "realice las actuaciones oportunas" para conseguir el "reintegro de cuantas cantidades hayan sido entregadas" al grupo de Otegi desde el pasado 20 de mayo--día en que se acordó la disolución de Sozialista Aberzaleak--. Además, le conminan a que "se abstenga de abonarle cantidad alguna en lo sucesivo, todo ello bajo apercibimiento de responsabilidad personal".

ADVERTENCIA A ATUTXA

Los jueces también exigen que se retire al grupo disuelto "el disfrute de cuantos locales y medios materiales les fueron asignados" cuando se constituyeron en grupo. Y advierten de que actuarán penalmente contra Atutxa y el letrado mayor-secretario general en el caso "de desatención o incumplimiento" de su mandato.

El Supremo ha adoptado estas medidas por entender que Atutxa no ha seguido el criterio que marca el artículo 20.3 del reglamento de la Cámara, que establece que un diputado que deja de pertenecer a un grupo debe pasar al Grup Mixto.

Para los jueces, Sozialista Aberzaleak ya no existe al haber sido disuelto por orden judicial. Por ello, concluyen que el procedimiento seguido por Atutxa --que propuso modificar el reglamento para acatar la orden judicial-- ha sido ilegal.