El Tribunal Supremo ha estimado parcialmente el recurso presentado por la fiscalía del Tribunal Supremo a la que se adhirió el Partido Socialista de Valencia (PSV) contra el archivo del caso Camps. Asimismo ha ordenado el reenvió de las diligencias al magistrado instructor de la causa en Valencia para "que continúa su tramitación en la forma legalmente procedente".

Camps está acusado de aceptar trajes regalados por la empresa Orange Market, una de las más activas en la trama Gürtel.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, avaló la semana pasada a Camps ante la ejecutiva de su partido, asegurando que sería candidato a presidente de la Generalitat Valenciana "pase lo que pase" con el caso en el Supremo, aunque posteriormente matizó sus palabras negando que lo fuera a mantener si lo encontraban culpable.

El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) archivó la causa abierta contra Camps al considerar que no había relación entre los regalos y la adjudicación de contratos públicos a Orange Market, la sociedad de Álvaro Pérez, el Bigotes. El tribunal valenciano ni siquiera entró a estudiar un contundente informe policial referido a la facturación de la citada empresa, que en cambio el instructor del caso Gürtel en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), Antonio Pedreira, sí ha incluido en el sumario.

MEDIDA PREMATURA

Precisamente, la precipitación del cierre de la causa por parte del tribunal valenciano es uno de los argumentos que utiliza la fiscalía en su recurso ante el Tribunal Supremo para que se reabra el caso de Camps. El ministerio público advierte en su escrito de que, el hecho de ser un sobreseimiento definitivo y no provisional, hacía imposible reabrir la causa "aun cuando aparecieran nuevos datos referidos a los hechos del procedimiento".

Y estos datos efectivamente han aparecido. En el proceso que instruye Pedreira se incluye un informe policial con facturas en negro de Orange Market por un valor total de más de 6,3 millones vinculadas a una presunta financiación ilegal del PP valenciano. Además, se atribuye a la filial del grupo de Correa el papel de intermediaria entre varias constructoras contratadas por la Administración valenciana y el pago de facturas electorales de los conservadores. La Fiscalía Anticorrupción pide la imputación de estos constructores y que se unifiquen todas las causas relacionadas con la trama Gürtel, incluida la rama valenciana, en una sola y que la asuma el Tribunal Supremo, dado que hay varios aforados imputados.

PANTALONES A 100 EUROS

Otra de las perlas del sumario relacionada con los trajes de Camps es un informe policial con los precios "en origen" de trajes que Milano y Forever Young suministraron, por mediación de Orange Market, a los dirigentes valencianos. Las diferencias entre lo que cobraba una de las firmas que confeccionaba los trajes, Sastgor, y lo que presuntamente pagó Orange Market son abismales.

En el primer auto del juez Baltasar Garzón se explicaba que Orange Market pagó a Milano y Forever Young por la ropa de Camps 12.783 euros; 9.950 por la de Rafael Betoret (exjefe de gabinete de la Consejería de Turismo) y 9.950 por la de Ricardo Costa (exsecretario general del PP valenciano). Cifras que contrastan con los 248,6 euros que cobró Sastgor a Forever Young por un traje a medida para Camps, los 630 facturados por seis pantalones para Costa y los 150 de un gabán para Betoret.