CDC decidió ayer suspender "temporalmente" la militancia de los dos exaltos cargos de CiU en la Generalitat Macià Alavedra y Lluís Prenafeta, una vez que han ingresado en prisión como imputados en el caso Pretoria. Sin embargo, los convergentes advirtieron de que la medida va dirigida a cortar de raíz cualquier vinculación del partido con la trama corrupta, ya que siguen confiando en su inocencia. El portavoz de CiU en el Parlamento catalán, Oriol Pujol, anunció que la ejecutiva de CDC aprobará mañana la tramitación de las suspensiones temporales "para una mejor defensa de su inocencia".

Mientras, el PSC no ha tenido la más mínima palabra de afecto por sus cargos implicados --más allá de la presunción de inocencia-- y el anuncio de la expulsión fue inmediato, los convergentes renovaron ayer su "estima y calor" para los encarcelados.

El expresidente de la Generalitat Jordi Pujol no se ha pronunciado, pero su hijo Oriol Pujol reveló ayer que su padre asiste a los acontecimientos de los últimos días con "un punto de tristeza, consternación y preocupación". "No se lo ha tomado muy bien. Está especialmente dolido", dijo.