Fue la reunión más crispada que jamás ha celebrado la junta directiva del PP madrileño, una organización hasta ahora exenta de conflictos bajo la presidencia de Pío García-Escudero. Casi cinco horas duró la sesión del miércoles por la tarde, que concluyó en la madrugada de ayer. De los 76 miembros de la junta directiva regional que pidieron la palabra, sólo ocho (el 10%) lo hicieron para apoyar la candidatura de Manuel Cobo, en la que también figuraba Alberto Ruiz-Gallardón.

Los partidarios de Cobo fueron un diputado autonómico, Javier Rodríguez; un edil de Torrejón de Ardoz, Pedro Rollán; y, cómo no, seis concejales o altos cargos de Gallardón. La concejal de Urbanismo, Pilar Martínez, llegó a reclamar garantías de "transparencia" en el proceso de elección de los compromisarios del congreso.

Más de 60 intervenciones fueron favorables a la candidatura de Aguirre, y las restantes apostaron por una lista de integración. En otros, apoyaron a la presidenta madrileña cuatro ediles de Gallardón y numerosos cargos locales de los principales municipios de la Comunidad de Madrid.