El ex minero asturiano José Emilio Suárez Trashorras negó hoy haber ofrecido explosivos a nadie, incluida ETA, y tras calificar esta acusación contra él de "película", aseguró que fue el ex confidente de la Guardia Civil Rafá Zouhier el que le preguntó dónde podía encontrar explosivos.

"Eso de que hemos ofrecido explosivos es falso, y hay películas como que hemos vendido 250 kilos a ETA cuando ETA no ha tenido explosivos en los dos últimos años (...) o que si hemos cambiado droga por explosivos (...). Hemos sido seguidos por la Policía desde 2001 hasta 2004 y todo los resultados han sido negativos", se quejó Suárez Trashorras.

Trashorras, quien accedió a contestar las preguntas del fiscal jefe de la Audiencia Nacional Javier Zaragoza, que pide para él la máxima pena (38.667 años de cárcel) por ser quien supuestamente facilitó los explosivos para los atentados, afirmó también que fue Zouhier quien le preguntó dónde podía encontrar explosivo y negó haberle facilitado una muestra de explosivo en febrero de 2003.

Destacó además que él no pudo hacerse con el explosivo porque desde que se jubiló en 2002 no tenía acceso a Mina Conchita ni contacto con ningún empleado, y añadió que sólo conocía al acusado Raúl González, del que aseguró tampoco trabajaba ya en Mina Conchita, sino en otra mina asturiana.

Sobre Zouhier, acusado que le precedió en esta séptima sesión de juicio, explicó que una vez se acercó a él cuando fue a la cárcel de Villabona (Asturias) a visitar a su cuñado Antonio Toro "y por eso nos preguntó" por los explosivos.

Sin embargo, acto seguido se contradijo y sostuvo que vio a Zouhier "una o dos veces en la cárcel, pero no hablé con él" porque "yo a lo que menos importancia le daba era a ver un moro ahí detrás del locutorio".

Respecto a una entrevista que concedió al diario "El Mundo" en la que dijo que el suicida y presunto líder de la célula que perpetró el 11-M, Jamal Ahmidan, "El Chino", conocía a los dos etarras que fueron detenidos en Cañaveras (Cuenca) el 29 de febrero de 2004 con una furgoneta cargada de explosivos, señaló que no había dicho nada sobre este asunto porque nadie le había preguntado hasta ese momento por ello y porque cuando se lo dijo a la Policía le dijeron que eso "era imposible".

"Me dijeron que ETA no se relacionaba con traficantes y que era imposible esa relación" manifestó Trashorras al indicar que por eso le entró "la duda de que fuera un malentendido" y pensó que "El Chino", cuando le dijo "a los dos días de detener a los vascos" que habían detenido a un amigo suyo y que salía en la televisión (medio por el que Ahmidan le dijo haberse enterado de la detención), podía estar refiriéndose a otras personas.