Tres hombres posiblemente buscados por España por supuesta vinculación con ETA o por actos de kale borroka figuran entre los catorce detenidos hoy en el País Vasco francés en relación con el atentado en 2006 contra el hotel-restaurante del cocinero Alain Ducasse, indicaron a Efe fuentes próximas a la investigación.La operación fue llevada a cabo a primera hora por la Gendarmería y por la policía judicial de Bayona en diversas localidades, incluida Saint-Jean-Pied-de-Port y alrededores. Los registros están en curso, agregaron las fuentes. La Gendarmería precisó, en un comunicado, que unos 200 gendarmes participan en la operación.

Entre los detenidos se encuentran Urtzi García Montero -hermano de la etarra Ainhoa García Montero, arrestada en Francia en 2003-, Oscar Vizcain Indagoz y Jorge Petolaza Vilagrasa, indicaron a Efe otras fuentes. Señalaron que los tres no figuraban entre los objetivos de la redada de las fuerzas francesas de seguridad, al no tener órdenes de arresto contra ellos, sino que se encontraban en domicilios de detenidos cuando ha tenido lugar la operación.

La amplia redada policial de hoy se enmarca en las investigaciones sobre el atentado con explosivos perpetrado en junio de 2006 contra el complejo hotelero de Ducasse en Bidarray (Baja Navarra). Los detenidos que figuraban en la lista de objetivos de la operación y a los que la policía encuadra en medios nacionalistas vascofranceses no vivían en la clandestinidad, indicaron las fuentes. Precisaron que los arrestados en la redada no estaban armados.

El complejo hotelero de Ducasse había sido objeto de tres ataques anteriores, durante las obras de construcción. A finales de junio de 2006, un joven originario del centro de Francia fue imputado en ese caso por la juez antiterrorista parisiense Laurence Le Vert. La autoría del atentado de junio de 2006 fue reivindicada el pasado diciembre por el grupo denominado "Irrintzi" ("el grito", en euskera), que en un comunicado se atribuyó otros tres atentados contra objetivos inmobiliarios.

El recrudecimiento de la campaña con tintes nacionalistas contra objetivos inmobiliarios en el País Vasco francés -con una treintena de atentados en lo que va de año-, preocupa a los servicios franceses de la lucha antiterrorista.