Sin sorpresas. Los tres magistrados conservadores del Tribunal Constitucional secundaron ayer las tesis del PP y en sendos votos particulares cuestionaron la prórroga de la presidencia de María Emilia Casas. Para estos jueces, el Gobierno ha atacado la autonomía del TC al reformar la ley que rige esta institución.

La modificación de la ley ha sido avalada por cinco magistrados progresistas. Estos jueces consideran que es constitucional que el Senado elija a cuatro magistrados a propuesta de las comunidades autónomas y que el mandato de la presidenta se prorrogue hasta que cese como magistrada del tribunal porque es un norma no escrita de esta sede judicial. La sentencia rechaza que la reforma de la ley "desapodere" al Senado del ejercicio de una de sus funciones constitucionales. También niega que la reforma legal suponga "una renuncia, traslado o sustitución del Senado por parte de los parlamentos autonómicos".

Además, aclara que "ningún precepto constitucional impide expresamente" que las asambleas de las autonomías "puedan intervenir en la elección de magistrados del Tribunal Constitucional presentando candidatos al Senado". Asimismo, los jueces consideran que la reforma de la ley "no implica" que la Cámara alta "deje de ser el titular de dicha facultad".

Por su parte, los jueces conservadores sostienen que la reforma legal de prorrogar el mandato de la presidenta "es una intromisión inaceptable del legislador", según el presidente en funciones en esta deliberación, Vicente Conde. Este juez sostiene que esta decisión coloca al Constitucional en una "posición especialmente preocupante".