El departamento de Defensa, que dirige el ministro Federico Trillo-Figueroa, propone en el borrador de la ley de reserva y movilización que todos los españoles mayores de edad puedan ser movilizados "en caso de conflicto armado, situación de amenaza o agresión a la seguridad de España y de sus aliados o supuesto grave de riesgo, catástrofe, calamidad o desgracia públicas".

Este proyecto, que recogía ayer el diario El País, viene a sustituir un capítulo de la vigente ley del régimen del personal de las Fuerzas Armadas de 1999, que limita la posibilidad de ser movilizados forzosos a los españoles de edades comprendidas entre los 19 y los 25 años, y sólo en caso de que así lo requieran las necesidades de la defensa nacional.

"A TIEMPO PARCIAL"

El Ministerio de Defensa quiere poner en marcha lo que denomina "militares a tiempo parcial", a quienes la empresa en la que trabajen deberá seguir pagando el sueldo mientras participen en cursos o maniobras.

Para decretar la movilización general, según consta en el proyecto, el Gobierno presentará la correspondiente solicitud al Congreso de los diputados, que deberá dar su autorización, "pudiendo aprobarla en sus propios términos o introducir modificaciones". Con dicha autorización, el Ejecutivo decidirá "quiénes habrán de adquirir la condición de reservistas obligatorios, para lo que se respetará el principio de igualdad de oportunidades".

En el trasfondo de este borrador de ley subyace el problema de la falta de soldados. España cuenta oficialmente con 72.000 efectivos de tropa y marinería profesional, una cifra muy alejada de los 86.000 con que debería contar, según los Presupuestos Generales del Estado, o los 102.000 previstos en la ley del régimen del personal militar.

Diego López Garrido, del PSOE, consideró ayer que el borrador de Defensa es "una propuesta absurda y completamente disparatada, así como inconstitucional y autoritaria", y agregó que su aprobación supondría en la práctica "una especie de estado de sitio" de forma permanente.

Más duro se mostró IU. En un comunicado, la formación de Gaspar Llamazares lo tildó de "absoluto despropósito" contrario a la Constitución. Según IU, Defensa "quiere ocultar su ineptitud y el fracaso en el diseño de un Ejército profesional".