Las tropas españolas que se desplegarán en Irak a partir del próximo septiembre tendrán autorización para disparar a matar si son objeto de un ataque. El ministro de Defensa, Federico Trillo, desveló ayer en la Comisión de Defensa del Congreso que las "reglas de enfrentamiento" por las que se regirán los soldados prevén el uso de la fuerza, "incluyendo la letal".

Trillo se afanó en dejar sentado que la misión que desempeñarán en suelo iraquí los 1.300 militares españoles, la mayoría legionarios, "no tiene como finalidad la confrontación", pero añadió que "la lógica prudencia" aconseja establecer las "condiciones en las que la fuerza pueda ser empleada". Las tropas que participaron en la operación Libertad duradera en Afganistán no tuvieron permiso para disparar.

RESOLUCION DE LA ONU

El titular de Defensa justificó la legalidad y legitimidad del envío de tropas a la posguerra iraquí en la resolución 1483 del Consejo de Seguridad de la ONU, que ampara las tareas de "estabilización y seguridad" de Irak bajo la dirección de las fuerzas de ocupación: EEUU y Gran Bretaña. Precisamente ése fue el objetivo del ataque de la oposición, que rechazó en bloque apoyar al Ejecutivo por entender que el despliegue militar no tiene encomendada una "misión de paz". Todos los grupos, menos el PP, coinciden en que coloca a España entre las "fuerzas de ocupación", lo que la convierte en objetivo de los ataques que está intensificando la resistencia iraquí.

La seguridad de los soldados españoles centró buena parte del debate de ayer. El portavoz socialista, Manuel Marín, advirtió a Trillo de que la opinión pública "está dispuesta a entender incluso el sacrificio de una vida cuando es por una causa justa", aunque no podrá asumir el coste de las muertes que se produzcan cuando "ve injustificada la decisión de enviar tropas".

El hecho de que los 1.300 soldados españoles vayan a trabajar bajo el mando de un general de división polaco también suscitó comentarios de la oposición. Marín dijo que ése era el verdadero resultado de la cumbre de las Azores, e irónicamente añadió que España había pasado de "dirigir el mundo a ser dirigida por un general polaco". El portavoz de CiU, Carles Campuzano, también encontró simpática la circunstancia. "Visto desde Cataluña no deja de tener gracia que los soldados españoles vayan mandados por los polacos", bromeó.

FABRICA DE MONEDA

Además de detallar el despliegue militar español en el cuadrante centro-sur de Irak, que será relevado por otro contingente igual cada cuatro meses, Trillo reveló que el general de división de Tierra Ricardo Martínez Isidoro será designado segundo jefe de la división hispano-polaca, con posibilidad de alternarse en el mando con el responsable polaco. El ministro informó de que la Casa de la Moneda española se encargará de la emisión de billetes iraquís.