Ez" (no en euskera) fue la única palabra que pronunció ayer el exjefe de ETA Garikoitz Aspiazu, Txeroki , ante los jueces de la Audiencia Nacional que le comunicaron cinco autos de procesamiento por atentados perpetrados entre enero y febrero del 2002. El etarra permaneció más tiempo en los calabozos de la Audiencia Nacional que en el despacho de los magistrados.

Txeroki llegó a los juzgados al filo de las 10 de la mañana en un furgón de la Guardia Civil escoltado por una patrulla del instituto armado. Un cuarto de hora más tarde fue conducido ante el juez Ismael Moreno. El exjefe etarra entró al despacho con las manos esposadas en la espalda e iba vestido con una sudadera gris, pantalones vaqueros y zapatillas deportivas. El magistrado le interrogó por el envío de dos paquetes bomba al presidente del grupo Correo, Enrique Ybarra, y a la delegada de Antena 3 en el País Vasco, María Luisa Guerrero, el 17 de enero del 2002. También fue requerido por el intento de asesinato de la teniente de alcalde de Portugalete, Esther Cabezudo, del Partido Socialista, el 28 de febrero de ese mismo año.

Esta diligencia se prolongó media hora y, a las once de la mañana, entró en el despacho del juez Santiago Pedraz. El magistrado le preguntó por el atentado contra el diputado socialista Eduardo Madina, que perdió una pierna al explotar una bomba lapa adosada a su vehículo el 19 de febrero del 2002, y por la explosión de un coche bomba en Bilbao el 12 de enero de 2002.

El etarra, ante los dos jueces, se limitó a decir "ez" y se negó a firmar las actas de comparecencia. Los magistrados decretaron su ingreso en prisión "por el riesgo de fuga" y "por la gravedad de los hechos".

Después, Txeroki fue ingresado en los calabozos de la Audiencia Nacional. Alrededor de la una y media fue trasladado, de nuevo en un furgón de la Guardia Civil, hasta la cárcel madrileña de Soto del Real. Previamente, los jueces autorizaron "la entrega" del etarra a Francia. El país vecino accedió a su entrega temporal a España, que vence el viernes. Esta es la primera vez que las autoridades francesas aceptan trasladar a un miembro de ETA a España sin que le hayan juzgado.

LA ESTANCIA Fuentes judiciales explicaron que Txeroki no será devuelto antes de tiempo para que pueda contactar con sus abogados y preparar su defensa. El exjefe de ETA está imputado en otros 21 sumarios, entre ellos el atentado contra el aeropuerto de Barajas del 30 de diciembre del 2006 en el que perdieron la vida dos ecuatorianos y que puso fin a la tregua de ETA. También se le acusa de haber dado un rifle a Javier Pérez Aldunate para que matara al Rey.