UPN volvió a hacer oídos sordos a las advertencias del PP y suspendió de militancia, de forma cautelar, a su diputado díscolo, Santiago Cervera, que votó junto con los populares a favor de una enmienda a la totalidad a los presupuestos del Estado. Con Cervera, que no cumplió el mandato de su partido, también fue suspendido Jaime Ignacio del Burgo, el exdiputado que se había manifestado públicamente contra la decisión de abstenerse en la votación de las enmiendas a las cuentas socialistas. Ambos fueron privados del ejercicio de todo cargo público.
La ejecutiva de UPN, reunida ayer por la tarde, acordó además "reformular" el acuerdo de colaboración política que mantienen con el PP desde hace 17 años, con el aviso de que UPN mantendrá "la libertad y autonomía". La cúpula regionalista se dio por enterada de la decisión del PP de suspender temporalmente las relaciones entre ambas fuerzas, y mostró su total apoyo al presidente del partido y del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz, a quien Mariano Rajoy culpó de la diferencias surgidas.
Fuentes populares consultadas por este periódico resaltaron que la decisión se aleja del camino que permitiría recomponer las relaciones. La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, había dicho que "de ninguna manera" podía expedientarse a Cervera y Del Burgo.
