Los presidentes de la Comunidad Valenciana y de la Región de Murcia, los populares Francisco Camps y Ramón Luis Valcárcel, anunciaron ayer que presentarán un recurso ante el Tribunal Constitucional (TC) porque "se quiebra el derecho de igualdad entre comunidades" con el proyecto de aporte de agua a Cataluña. Así lo manifestó Valcárcel tras la reunión que tuvo con Camps, en la que pusieron como condición para no adoptar esta iniciativa la rehabilitación del derogado plan hidrológico del PP, una medida impensable para José Luis Rodríguez Zapatero.

Ambos mandatarios insistieron en que no quieren perjudicar a los catalanes, sino que desean el mismo trato y que el agua del Ebro llegue a Murcia y Valencia. Y para ilustrar su apuesta, acordaron pedir a Zapatero que la obra que se va a ejecutar para el suministro hídrico a Barcelona de manera temporal se convierta en permanente e incluso se incremente de 40 a 180 hectómetros cúbicos. La razón de esta cifra se remonta al Plan Hidrológico Nacional de José María Aznar, derogado por el Gobierno socialista. Según Camps, el PHN preveía esa cantidad de agua para Barcelona. Camps y Valcárcel convirtieron en papel mojado las palabras pronunciadas el miércoles por Soraya Sáenz de Santamaría, en el sentido de que el PP no adoptaría medidas sin haber escuchado primero a Zapatero.