La capital nepalí ha sido escenario de violentas manifestaciones por parte de jóvenes indignados con la matanza de los 12 trabajadores nepalís ayer en Irak.Centenares de manifestantes, en su mayoría estudiantes han atacado la Mezquita Yama en Katmandú, y han incendiado varios vehículos en la capital, exigiendo "venganza" por el brutal asesinato de los 12 nepalís, que habían sido secuestrados el pasado 20 de agosto.Las calles de la capital y las carreteras que pasan por la ciudad se encuentran bloqueadas desde esta madrugada por la multitud, que acusa al Gobierno de haber tardado demasiado en actuar para liberar a los rehenes.Uno de los manifestantes, Kapil Sharma, ha dicho a Efe que "estamos indignados. Nuestro Gobierno no hizo nada para liberar a los rehenes. Era demasiado lentos y exigimos su dimisión".Otros gritaban eslóganes contra el grupo iraquí Yeish Ansar al Sunna (Ejército de los partidarios de la Sunna), que secuestró a los trabajadores y que les mató ayer.La empresa Moonlight Consultants, para la cual trabajaban los rehenes, también ha sido atacada hoy por la multitud que ha incendiado los muebles de sus oficinas en Katmandú.El Gobierno pide calmaEl ministro de Información nepalí, Mohamed Mosin, pidió ayer al pueblo nepalí que "mantenga la calma en esta hora en la que la nación entera está conmocionada y profundamente dolorida". El Gobierno convocó ayer una reunión urgente tras conocer la matanza, que calificó de "brutal y repugnante".Los doce nepalís asesinados salieron de Nepal a principios del agosto para trabajar como cocineros en Jordania, y no en Irak, donde finalmente fueron llevados por una empresa que trabaja para los militares estadounidenses en ese país.La ejecución de los rehenes nepalís fue revelado ayer por la cadena de televisión árabe Al Jazira, que aseguró haber visto las imágenes de los cadáveres de los doce nepalís, uno de los cuales fue decapitado mientras que el resto murió por disparos.