El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha contraído hoy un "compromiso solemne" en nombre del PSOE de no usar el terrorismo en la confrontación política, y ha llamado a "pasar página" y que el resto de partidos actúen de la misma forma. Zapatero ha ratificado ese compromiso en su intervención ante el Comité Federal del PSOE al referirse a la sentencia del 11-M y a todo lo sucedido desde esos atentados.

El jefe del Ejecutivo ha señalado que, tras aquellos atentados, los socialistas garantizaron que la democracia iba a cumplir con sus obligaciones, que el Estado de Derecho iba a demostrar su fortaleza y que la Justicia iba a permitir que se supiera la verdad de lo ocurrido y se culpara a sus responsables. Ahora, tras conocer la sentencia judicial, considera que hay que extraer dos lecciones, la primera de ellas consistente en que, efectivamente, las víctimas y sus familias han podido ver que las instituciones funcionan.

La segunda lección, a su juicio, es que nunca más el terrorismo, un atentado terrorista, debe ser usado en la confrontación política entre demócratas. "Creo que esa es una lección esencial, y espero que todos nos apliquemos ese principio que fortalece la convivencia y que consiste en dejar siempre al lado, entre demócratas, lo que representa el terrorismo", ha añadido.

Según Zapatero, "no cabe el terrorismo en la política, no debe caber entre demócratas y, menos aún, en la puesta en duda de lo que representó un atentado como el del 11-M". "Por ello -ha proseguido- pasemos página, que quede sólo entre nosotros el sentimiento de afecto, apoyo, cariño y abrazo a las víctimas, y que todas las partes que han sido, en ocasiones, profundamente negativas en torno al debate sobre ese atentado queden simplemente en un mal recuerdo pero en ningún caso como algo que se repita en el futuro".

Una forma de actuar que dijo que era el "compromiso solemne" que hoy adquiría, en nombre del PSOE, ante los ciudadanos y el resto de fuerzas políticas Zapatero ha subrayado que España se ha fortalecido en su lucha contra el terrorismo radical islamista desde los atentados del 11-M y se ha detenido a 300 personas relacionadas con el mismo.