El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha ceñido a la solidaridad y a la cesión de impuestos como margen de negociación del sistema de financiación con los partidos proponentes del proyecto de reforma del Estatut catalán (CiU más el tripartito formado por PSC, ERC e ICV). Precisamente, y según la argumentación que ha hecho el jefe del Ejecutivo, estos son dos aspectos que saldrían fuera del Estatut, remitiéndose al próximo Consejo de Política Fiscal y Financiera.

Zapatero ha añadido que el 27 de diciembre es fecha para fijar los acuerdos y los desacuerdos, pero que también está enero. El presidente del Ejecutivo se ha pronunciado así durante una conversación informal con periodistas durante la tradicional copa que ofrece La Moncloa a la prensa con motivo de las fiestas navideñas.

En primer lugar el presidente ha estimado que habrá Estatut y que, a día de hoy, hay más posibilidades de que salga adelante que de que no. También ha puesto de manifiesto que la sociedad catalana quiere que haya Estatut y que, cuando la sociedad quiere algo, las cosas acaban fluyendo.

En cuanto al límite que supone para la negociación el tope del 27 de diciembre para la presentación de enmiendas, el jefe del Ejecutivo ha sido más flexible en su planteamiento, indicando que puede ser ese día, "el 30 o en enero", dado que, según vino a decir, la negociación política no puede quedar ceñida a una fecha.